Mayoral, en su taller, durante la realización del Cristo de la Humildad | Foto: JMFC |
19 de marzo de 2018
Partirá la marcha penitencial del Santísimo Cristo de la Humildad de la iglesia de San Martín, después de haber recibido la bendición de fray Francesco Patton, máxima autoridad franciscana de la Custodia de Tierra Santa.
Será la primera vez que en ese caminar penitente por las calles de la ciudad más hermosa, se recordará a los cristianos de la Parroquia del Memorial San Pablo de Damasco, donde descansa Fray Romualdo Fernández Ferreira, raíz fundacional de la Hermandad Franciscana salmantina. El fraile figueruelense fue querido y cuidado por los feligreses sirios durante su larga convalecencia, después de haber afirmado que jamás saldría de Siria, pues aquella tierra guarda en los surcos de su corazón la simiente inicial de la orden franciscana.
Será la primera vez en la que, al abrirse las puertas de San Martín, comenzará una cadena de oración franciscana por la paz en decenas de monasterios de clausura, entre los que se encuentran representadas todas y cada una de las comunidades autónomas de España.
En ese rezo inter conventual participarán todos los conventos de clausura franciscanos de Salamanca: Corpus Cristi, Úrsulas, Isabeles, Claras, Madre de Dios y nuestras hermanas Franciscas Descalzas (a las que tanto les debemos). También se une el monasterio dominico de las Dueñas.
Será la primera vez en la que los nazarenos franciscanos fortalecerán por las calles salmantinas, en silencio, su compromiso con los hermanos de Tierra Santa, agradeciendo al Señor de la Humildad su increíble obra de amor, por medio de los hijos de San Francisco, que llevando más de 800 años en aquellas tierras siguen valientemente acompañando (sobre todo en Siria) a los seres humanos que necesitan su ayuda, sin tener en cuenta la religión que profesen.
Será la primera vez en la que en su caminar penitente recordarán agradecidos a los tres artistas que han hecho posible, con sus portentosas obras de arte, un proyecto cargado de significados históricos, costumbristas y religiosos. Fernando Mayoral, Ricardo Flecha y Paloma Pájaro, con toda justicia, deben ser queridos y reconocidos por su implicación desprendida en un proyecto que perpetuará sus nombres en la historia de la Hermandad Franciscana de Salamanca.
Será la primera vez en la que la marcha penitencial pedirá fuerzas al Señor, para ir multiplicando con énfasis de humildad, la incorporación de nuevas cofradías a esa misión, a la que el Papa Francisco nos anima con todas sus fuerzas: "El problema de los cristianos de Tierra Santa, es un problema de todos los cristianos de todo el mundo".
Será la primera vez en la que los hermanos de la Franciscana llevarán en su corazón a las cofradías salmantinas que colaboran con sus donativos, en un compromiso claro con Tierra Santa. Esos donativos, al llevar su identificación, genera la alegría fraternal de nuestros hermanos en aquellas tierras del oriente, para hacerles sentir que no están solos ante el sufrimiento.
Será la primera vez en la que, callejeando de forma silenciosa, los cofrades darán gracias al Señor por todo lo que les está ofreciendo, pidiendo por la orden franciscana y por la misión de la Iglesia en todos los lugares del mundo.
Será la primera vez en la que…
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